UPADESA SARA
Comentario al texto original de Sri Ramana
Maharishi
Introducción
___
Sri Ramakrisnan
Swamiji
(“Dravidacharya”)
Traducción introducción y notas
Roberto Mallon Fedriani
2019
Novedad en Ediciones Vía Directa: https://edicionesvia.com/index.php/product/upadesa-sara/
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Este libro
constituye la transcripción y re-fundición de una serie de clases impartidas por
el maestro tradicional de Vedanta Advaita, Sri Ramakrishnan Swamiji,
“Dravidacharya”[1]. El
punto de partida de estos comentarios que presentamos hoy es el famoso texto de
Sri Ramana Maharishi titulado Upadesa
Sara.
Se cuenta que
el origen de Upadesa Sara parte de
uno de los Puranas en donde el Señor Shiva expone el conocimiento vedántico a
un grupo de sabios (rishis). Estos
sabios eran seguidores de la escuela (darsana)
Purva Mimansa, la cual sostiene el
carácter supremo de la acción como medio para obtener resultados, tanto en este
mundo como en el “más allá”. Los mimansakas
afirman que la ejecución de los distintos rituales expuestos en los Vedas son
el único medio para alcanzar la realización espiritual del buscador.
Uno de los
discípulos de Ramana Maharishi, de nombre Muruganar, intentaba resumir las
enseñanzas que el Señor Shiva expuso, en una súbita aparición ante estos sabios
mimansakas, en relación a la Vía del
Conocimiento (jñana marga), también
llamada Uttara Mimansa; o como es más
conocida en el mundo occidental, el Vedanta Advaita. Viéndose Muruganar de
alguna forma bloqueado en su labor, pidió ayuda a Ramana Maharishi. Fue así
como Maharishi redactó los sencillos versos que constituyen este Upadesa Sara, y que sintetizan las
enseñanzas fundamentales respecto a las distintas vías de realización
espiritual según la tradición védica.
Upadesa Sara consta de
treinta versos que resumen la esencia del Vedanta, y es por ello por lo que la
interpretación de todo su significado requiere la ayuda de un maestro
cualificado que ayude a su correcta comprensión. Lo más característico de esta
obra es la manera en la que Ramana Maharishi expone los distintos caminos o
vías que cada buscador ha de seguir
según sea su propia naturaleza y estado actual de realización espiritual; caminos
que, básicamente, son cuatro: 1) Karma
Yoga, o “yoga de la acción”; 2) Bhakti o Upasana Yoga, el “yoga
devocional”; 3) Ashtanga Yoga, el “yoga de los ocho miembros”, de
Patanjali; y 4) Jñana Yoga, o “yoga
del conocimiento”, que constituye la “vía última” expuesta en los Upanishad, y
que en general se conoce como Vedanta Advaita.
El
planteamiento general de Ramana Maharishi es que, si bien el jñana yoga es la vía superior y la única que última instancia conduce a
la iluminación –la Liberación o moksha–,
sin embargo, las otras vías son necesarias de cara a la purificación mental o
purificación del “corazón” del buscador; una preparación sin la cual el acceso
al conocimiento directo (aparoksha) difícilmente
podrá realizarse.
Para Ramana
Maharishi, todos los caminos indirectos (karma,
bhakti, yoga) han de ser respetados, y habrían de seguirse en la medida que
fuese necesario de cara a conducir al buscador al jñana yoga, o camino
directo. Este último es también llamado, “vía de la auto-indagación” (vichara marga), tan divulgada en los
últimos tiempos en occidente, y que puede resumirse en la conocida pregunta que
el buscador se hace a sí mismo: “¿Quién
soy yo?”.
Sri Ramana
Maharishi aborda aquí todas las vías posibles, pues si bien enfatizaba el
camino de la auto-indagación, era consciente de la dificultad de comprensión
que éste suponía para la gran mayoría de los buscadores. Afirmaba que si el
temperamento del aspirante no encajaba con la auto-indagación (vichara marga), éste debería desarrollar
a modo preparatorio la devoción (bhakti)
a la divinidad, al gurú, a la humanidad en general, o incluso a la Belleza, ya
que con ello el resto de apegos individuales se debilitarían y se desarrollaría
progresivamente uno de los requisitos previos esenciales para llegar al Conocimiento:
el “desapego” o vairagya. Si el
buscador no se sentía predispuesto a ninguna de las dos vías anteriores (auto-indagación
o devoción), entonces los métodos del Ashtanga
Yoga podrían ayudarle en esa
purificación mental previa, si bien su práctica requiere un estado físico
excepcional. Finalmente, si por razones temperamentales o de disposición
física, ninguno de los tres caminos anteriores se ajustaba a su condición
natural, entonces debería seguir el karma
yoga, esto es, la realización de
buenas acciones sin preocupación por el beneficio que pudieran reportar los
resultados al propio ego (aunque sí por la calidad de la acción misma); en
definitiva, ofreciendo la acción a la divinidad.
Después de la
necesaria maduración a través de la práctica de una o de varias de estas vías
preparatorias (karma, bhakti, yoga) –práctica que por lo demás se admite que pudiera haberse
venido realizando en existencias anteriores–, entonces el aspirante espiritual
se hace lo suficientemente receptivo como para acercarse a un maestro realizado
y debidamente cualificado, y transitar el camino del Conocimiento Último o jñana marga.
A lo largo del
texto, Ramana Maharishi va exponiendo la mejor forma de llevar a cabo cada una
de las prácticas (sadhanas), de modo
que el buscador no pierda de vista el objetivo final del camino; objetivo que
no es otro que el de la Realización de la Identidad eterna entre la esencia del
“alma viviente” (Jiva) y la de la
Divinidad Absoluta (Brahman). Tat tvam asi: “Tú eres Eso”.
El texto cabe
dividirlo en cuatro grandes bloques temáticos dedicados a cada una de las vías
tradicionales de Realización según la Tradición védica hindú. Si bien se
solapan entre sí, se pueden distinguir los siguientes:
Vía (marga)
|
Descripción
|
Versos
|
Karma – Vía de la acción
|
El resultado de las propias acciones
ofrecido a la Divinidad.
|
1–3
|
Bhakti o Upasana – Vía de la
devoción y adoración.
|
Devoción y adoración de una Divinidad
exterior.
|
4–10
|
Yoga – Vía del Ashtanga Yoga
|
Práctica de las disciplinas expuestas
por Patanjali.
|
11–16
|
Jñana – Vía del Conocimiento
|
Aproximación a un gurú. Escucha (sravana), reflexión (manana) y asimilación (nididhyasana) de las Escrituras
Sagradas (Shastras).
|
17–30
|
Desde un punto
de vista más general, también se pueden agrupar los versos de modo que del
verso 1 al 11 se exponen las “vías preparatorias”, y a partir del verso 13
hasta el 30 se va exponiendo progresivamente la “vía de la auto-indagación” o vichara marga.
El comentario
que nos presenta aquí Sri Ramakrishnan Swamiji (Dravidacharya) es el resultado
de múltiples notas tomadas en las sucesivas charlas que el Swami impartió al
respecto. Comienza con la traducción y análisis de cada uno de los términos
contenidos en los versos o slokas,
para a continuación desarrollar y clarificar su contenido implícito. Por nuestra
parte, hemos añadido una serie de notas a pie de página allá donde hemos creído conveniente
algún comentario o aclaración.
Ver en : No-dualidad- / libros
*
[1] N.T. Ver “Comentarios
al Tattva Bodha”, Sri Ramakrishnan Swamiji ‘Dravidacharya’, Traducción y
notas Roberto Mallón Fedriani, Ediciones Vía Directa, Valencia, 2019. “Comentarios
a Sadhana Panchakam; El camino del Vedanta según Shankara”, Sri
Ramakrishnan Swamiji ‘Dravidacharya’, Traducción y notas Roberto Mallón
Fedriani, Ediciones Vía Directa, Valencia, 2019.